La experiencia ERASMUS
permite a los estudiantes abrirse paso en el mundo de la investigación
universitaria en otros países. Gracias a este convenio tres alumnos de la
Escuela de Ingeniería Industrial (EII) de Toledo se encuentran actualmente realizando un proyecto de
investigación sobre la eficiencia del hidrógeno en motores eléctricos. Los
jóvenes estudian la forma de conseguir recorrer la mayor distancia posible con
un litro de hidrógeno.
Casto Gutiérrez, Jorge
Marcos Puñal e Ignacio de Sande son tres de los ocho alumnos que la Universidad
de Castilla La Mancha (UCLM) ha designado para su programa de Erasmus en la
Universidad noruega de Østfold (Høgskolen i Østfold). Estos tres estudiantes
de Injeniería Industrial de Toledo, inmersos en el área de
Electrónica/Electricidad, desarrollan su proyecto sobre la eficiencia del
hidrógeno como combustible coordinados por el Profesor Even Arntsen y la
colaboración del docente Reidar Nordby.
La
investigación consiste en medir la eficiencia del hidrógeno como combustible
para vehículos de motor eléctrico mediante ‘Fuel Cell Batteries’, baterías de
hidrógeno como combustible, atendiendo a las normas de la competición ‘Shell
ECO-Marathon’. El objetivo principal de la investigación, en palabras de los
estudiantes, es conseguir recorrer la mayor distancia posible con un litro de
hidrógeno.
“Parece
contradictorio que uno de los principales países exportadores de petróleo del
mundo, fomente y subvencione este tipo de investigaciones”, resalta Casto
Gutiérrez, uno de los estudiantes inmersos en el proyecto. No obstante matizó a
Infoactualidad que aunque el petróleo sea para Noruega su mayor
fuente de ingresos, es un país muy comprometido con el medio ambiente.
HiØ se encuentra en la parte sureste de
Noruega, entre la capital, Oslo, y la frontera con Suecia. La
Universidad, que está formada por seis departamentos repartidos
en dos ciudades de la región de Østfold, Halden y Fredrikstad, cuenta con unos 4.500 estudiantes y 500
miembros entre su personal administrativo y de servicios y ofrece una amplia
gama de programas de grado y algunos máster. “En el Campus de Fredrikstad, nos
hemos sentido como en casa y nos integramos entre los estudiantes locales desde
el primer día”, sañaló Jorge Marcos Puñal.
Sin
embargo, los jóvenes estudiantes señalan
la dificultad de acostumbrarse a la forma de trabajo del país como una de las
dificultades que han tenido en su adaptación. “En las Escuelas de Ingeniería
noruegas profundizan mucho más en la práctica que las españolas”, reconoció
Ignacio de Sande.
Los convenios de
intercambio de la UCLM con instituciones en el extranjero permiten que los
estudiantes puedan estar desempeñando sus estudios en una universidad distinta
a la suya. No obstante, ello exige que los alumnos internacionales aceptados en el
marco del programa de intercambio Erasmus hayan estudiado por lo menos un año
en su universidad de origen.
En
total ocho estudiantes de la Universidad de Castilla La Mancha se encuentran
ahora mismo en la Universidad noruega de HiØ.
Ello les ayuda en su formación y además les posibilita la opción de investigar
e indagar en nuevos ámbitos, como es el caso de Casto, Jorge e Ignacio en su
apuesta por aumentar la distancia a través del hidrógeno.
El
objetivo de estos estudiantes de la Universidad de Castilla La Mancha está
marcado por la distancia. No obstante, destacan que el idioma no ha sido un
inconveniente para estos jóvenes con apuesta de futuro ya que, según
manifiestan, el nivel de inglés en Noruega es muy elevado en todos los niveles
de la sociedad y no han tenido mayor inconveniente para manejarse en esta
lengua.
“Estamos
muy contentos y satisfechos con el trabajo realizado, el nivel de inglés
adquirido y la experiencia personal vivida, a pesar de haber residido durante
casi un año en el país más caro y frío de Europa”, afirma Casto Gutiérrez como
resumen a su experiencia Erasmus.